sábado, 8 de octubre de 2016

Carne de casting



Si, esta bien, te llamas Ricardo, acabamos de encontrarnos.
Y tu nombre me has dicho esperando que me acuerde
y a los otros hacer notarlo.
Desapercibido misterio que se confunde impotente
en la gran cantidad de gente que viene a visitarnos.

Una langosta en la manga, un ave en la bandada,
una abeja en el enjambre, una gota en el mar.
Me olvidaré de tu rostro apenas te des la vuelta,
recordar rostros me cuesta de tanto verlos pasar.

Y tal vez andando el tiempo te me acerques y preguntes
con candidez inocente, ¿Te acuerdas tú de mí?
y no sabré responderte por mas que con datos alumbres
mi memoria, que no tuvo, ningún lugar para ti.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario