La noche es propicia, descansemos un rato,
sentemos juntos, muy juntos los cuatro.
Los padres, los niños la mesa comparten
los juegos, la risa, la tertulia afable.
Cosas no comunes ya por estos días
estos especiales ratos memorables.
Hogar y familia, amor y cariño,
alivio a los padres, refugio a los hijos,
y el ángel del cielo, un mudo testigo
a Dios le comenta aquello que ha visto.
-Hoy vi a una familia en reposo y calma,
todos se querían, todos se ayudaban.
La madre virtuosa, el padre prudente
y con alegría los hijos jugaban.
-La hora del culto era muy esperada
y con reverencia se arrodillaban
para pedirte con toda sus almas
que con tu bondad bendigas la casa.
Cosas no comunes, esto que acontece…
La familia que ora, unida permanece.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario